El proyecto del edificio se llevó a cabo en 1904 pero no fue hasta 1906 cuando se colocó la primera piedra
Fue proyectado por el arquitecto manresano Josep Firmat i Serramalera en 1917, siguiendo los parámetros modernistas propios del momento. Se alza sobre una base de piedra que despliega una importante decoración floral. Dicha base sostiene un cuerpo principal de madera y vitral, así como una cubierta de hierro forjado.
Actualmente forma parte de la Oficina de Turismo de Manresa, y funciona como punto de información durante algunas ferias y festividades de la ciudad.