Las Fiestas de San Ignacio tienen su origen en 1622, año de la canonización del peregrino y centenario de su estancia en Manresa. Tradicionalmente, han sido organizadas por la asociación de comerciantes, con diversas actividades en el Centro Histórico, y La Cova de Sant Ignasi (La Cueva de San Ignacio), que ofrece misas en varios lugares ignacianos.
El Ayuntamiento se ha unido al programa de actos de la fiesta organizando un conjunto de actos culturales y lúdicos, que se han ido incrementando con la intención de potenciar la fiesta, hacerla más atractiva y extender su difusión y participación.
Se trata de una actuación que tiene como objetivo mantener vivo el recuerdo del peregrino San Ignacio y hacerlo en un espacio festivo de convivencia y armonía. Estas fiestas son un marco idóneo para ayudar a consolidar el Centro Histórico, un espacio que lucha por recuperar la vitalidad que lo había caracterizado en el pasado, uno de los objetivos también del proyecto Manresa 2022, a través de conciertos, charlas, visitas guiadas, ferias, actividades culturales y celebraciones populares.