El proyecto del edificio se llevó a cabo en 1904 pero no fue hasta 1906 cuando se colocó la primera piedra
En el año 1522, la ciudad de Manresa acogió a un pelegrino llamado Ignacio de Loyola, que venía desde su tierra natal en Azpeitia y después de visitar Montserrat pretendía seguir el camino hacia Barcelona para embarcar hasta Roma y seguir caminando hacia Tierra Santa. Pero la casualidad o el destino lo trajeron hasta Manresa y los onze meses que estuvo en la ciudad le llevaron a una profunda transformación personal y espiritual que le llevaron a fundar la Compañía de Jesús, hoy presente en todo el mundo.
Manresa lo inspiró, lo iluminó y transformó y con esta experiencia pretendemos acercar a las personas a este proceso. La propuesta empezará en la preciosa bodega Oller del Mas, dónde se hará una actividad de conexión con el paisaje, el bosque y las viñas. Desde el Oller, caminaremos en silencio siguiendo el Camino Ignacio hasta Manresa, dónde haremos otra experiencia de conexión con el paisaje, en este caso ya urbano, y con nosotros mismos.
Acabaremos la experiencia visitando la basílica de la Seu, dónde San Ignacio encontró silencio y conexión y degustaremos productos locales y de proximidad acompañados por vino de l’Oller del Mas, en un bonito rincón de la basílica.
Actividad de 4 horas, preferiblemente para realizar a primera hora de la mañana hasta mediodía.
Para más información y reservas: comercial@manresaturisme.cat